PETER BEHRENS

PETER BEHRENS

Fue pintor, diseñador y arquitecto autodidacta. Se interesó por la pintora impresionista. Fue fundador en Múnich de los talleres de arte y artesanado. Fue un diseñador gráfico muy renombrado. En 1899 diseña su propia casa, en 1903 es nombrado director de la escuela de artes y oficios de Dusseldorf y en 1907 es miembro fundador de la werkbund. En ese mismo año, es nombrado consejero artístico del grupo AEG, en el que ejerció un trabajo determinante sobre la imagen de la empresa, es decir, sobre la publicidad, los productos y la arquitectura.

AEG producía artículos vinculados al aprovechamiento de la energía eléctrica y la bombilla incandescente.

Peter behrens como arquitecto:

Behrens realiza en Berlín y alrededores varias fábricas para AEG entre ellas la célebre fábrica de turbinas de AEG que realiza entre 1908 y 1909. Esta construcción industrial, la primera del género, es una verdadera realización artística, está hecha de vidrio y de acero y evoca con audacia las líneas puras de un templo antiguo recurriendo exclusivamente a materiales modernos. Está considerada como el primer edificio de la arquitectura moderna por su franqueza en la estructura, por el empleo del vidrio con un sentido nuevo, funcional y estético, y por la renuncia a la decoración. El edificio es un emblema del pre-racionalismo, la fábrica como obra arquitectónica debía tener la monumentalidad que hasta entonces estaba reservada a los edificios representativos, después de esta construye otra fábrica“la fábrica de motores pequeños”. Después de 1910, realiza una arquitectura en una línea neoclásica cuyo mejor ejemplo es la embajada imperial alemana de San Petersburgo.

Entre 1920 y 1924 realiza el edificio administrativo I.G Farben en Frankfurt. El edificio se encuentra entre las construcciones más destacadas de la arquitectura expresionista que siguió a la guerra de 1914. Se trata de una construcción de ladrillo rojo con estructura de hormigón armado. El puente que une la fábrica antigua con la nueva construcción, la torre y los arcos parabólicos se convierten en una referencia de la construcción.

El vestíbulo es el espacio más significativo del interior. Es de planta rectangular, tiene una altura de 15 m abarcando los 5 pisos del bloque central. Este espacio está definido por 8 grandes pilares de sección triangular que crecen gradualmente y que están teñidos con los colores del arcoíris en alusión a los tintes que fabrica la empresa, desde el violeta y azul en la planta baja, hasta el amarillo. El espacio se cubre con 3 grandes lucernarios facetados.

Behrens diseñó además todos los detalles del edificio, pavimentos, vidrieras, lámparas, rejas, y mobiliario. Y para acabar, behrens es un maestro de maestros, su estudio se transformó en un laboratorio de la modernidad, por el pasaron Gropius, Le Corbusier, Meyer y Mier Van Der Rohe